Todos hemos asistido a la demostración de seguridad previa al vuelo: "En caso de emergencia, las máscaras de oxígeno caerán del techo. Siempre debe colocarse su propia máscara antes de ayudar a cualquier persona". Aunque a menudo pasamos por alto esta advertencia por su frecuencia, tiene una poderosa aplicación al tema del Código de Honor de julio de Ascend: no se puede servir de un vaso vacío.
La metáfora nos recuerda la importancia del autocuidado y de establecer prioridades. Al igual que un vaso sólo puede verter lo que contiene, sólo podemos dar a los demás lo que poseemos en nuestro interior. Las personas que trabajan en el campo de la ABA y los cuidadores de niños con discapacidades físicas, intelectuales o del desarrollo se enfrentan cada día a situaciones que suponen un gran reto físico y emocional. Descuidar nuestras propias necesidades puede conducir al agotamiento, el agotamiento y el resentimiento. Es fundamental reconocer que cuidar de nosotros mismos no es egoísta, sino esencial para nuestro bienestar. Rellenando nuestra copa con prácticas de autocuidado como el descanso, la autorreflexión y las actividades nutritivas, nos aseguramos de tener la energía, la compasión y los recursos para dar a los demás sin agotarnos.
Cuando descuidamos el autocuidado e intentamos servir de una taza vacía, nuestra capacidad para estar plenamente presentes y ser eficaces en nuestras relaciones y responsabilidades disminuye. Podemos sentirnos agotados, abrumados e incapaces de satisfacer las demandas que se nos imponen. Al dar prioridad al autocuidado, llenamos nuestra copa y cultivamos un estado de equilibrio y abundancia interior. Esto nos permite mostrarnos lo mejor de nosotros mismos, ser más pacientes, comprensivos y compasivos con los demás, y afrontar los retos de la vida con mayor resiliencia.
Tanto si necesitas dedicar tiempo a buscar un grupo de apoyo, llamar a un terapeuta o simplemente dar un paseo, date prioridad a ti mismo: llena tu copa para poder ser la mejor versión de ti mismo, no sólo para ti, sino también para los que te rodean: tu familia, tus amigos, tus clientes, las personas a las que sirves y tu comunidad.